Varios equipos de rescate han pasado la noche intentando poner a salvo con helicópteros y botes hinchables a decenas de personas atrapadas por las inundaciones en el noroeste de Inglaterra y sur de Escocia.
La región más asolada por las lluvias torrenciales, que han hecho desbordarse varios ríos, es la de Cumbria, donde más de doscientas personas han tenido que abandonar sus hogares y refugiarse en centros especiales. Según la Agencia del Medio Ambiente, cientos de casas de la región están inundadas y las localidades de Cockermouth y Keswick son las más afectadas.
En Cumbria, un agente de la policía británica ha desaparecido tras el derrumbamiento de un puente, según ha informado la policía. Se perdió la pista del agente después de que este puente de la localidad de Workington cediera al pes del agua.
Noticia de El País
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